Si eres freelance, tal vez estés buscando maneras de aumentar tu productividad laboral, pues este factor muchas veces influye en tu capacidad para obtener más proyectos y así ganar más dinero.
Si bien es cierto que hay muchas maneras de aumentar tu productividad, hay ciertos hábitos que deberías tener en cuenta para mantener tu productividad laboral al máximo en el día a día.
Limpiar tu espacio de trabajo
Un espacio de trabajo apropiado puede aumentar tu productividad laboral. Y encargarte de mantener este espacio limpio, organizado y en óptimas condiciones para trabajar es un deber y una necesidad. Así que, al final del día, tómate unos minutos para organizar tu espacio de trabajo y dejarlo listo para empezar con muchas energías al día siguiente.
Revisar tus mensajes
Es buena idea dar una última revisión a los mensajes telefónicos y realizar anotaciones por si necesitas enviar un archivo a cliente o devolver una llamada a primera hora. Asimismo, deberías revisar los mensajes que ya no te sirven.
Revisar tus correos
Al igual que tus mensajes telefónicos, antes de irte revisa tu bandeja de entrada para verificar si debes enviar algún archivo a primera hora o tal vez, puede que en los últimos minutos antes de terminar tu jornada te llegue algún correo que debas contestar urgentemente. Obviamente, estas es una situación excepcional, pero nunca está de más ser precavido.
Guardar copias de seguridad
Para un freelance, una pérdida de datos sería terrible. Por ello, forma un hábito de mantener copias de seguridad de todos tus avances del día. Actualmente, tienes la facilidad de guardar tus archivos en la nube, de modo que siempre están donde los necesitas y siempre puedes recuperarlos.
Indicar cuánto avanzaste y dónde te has quedado
Como freelance, es probable que te involucres en proyectos de gran escala. Proyectos que usualmente te llevan semanas, en este caso es bueno mantener un calendario así como una lista organizada de tus actividades. Siempre marca cuando hayas cumplido ciertas tareas y cuando te falte completar alguna. De ese modo, será más sencillo regresar a tus actividades diarias tras un buen descanso.
Tomarte un descanso
A pesar de lo atareado que puedas estar, siempre tómate un breve descanso entre tus actividades, de esa manera podrás trabajar con más energías. Asimismo, al terminar tus tareas del día, asegúrate de realizar otras actividades que disfrutes como leer un libro, ver alguna película, tomar un relajante baño o tal vez simplemente escuchar música. Sea la actividad que sea, asegúrate de disfrutarla como es debido.
Dormir bien
No hay mejor factor que contribuya a tu productividad que unas buenas horas de sueño. Así que descansa como es debido, es mejor que sea de forma ininterrumpida y en las noches.