Vender tu arte digital puede ser difícil al comienzo. Esto sucede porque las personas no conocen tu marca, pero existen manera de obtener el tráfico que necesitas para mantener tu negocio de venta de arte a flote. Para poder vender tu arte digital online deberás tomar una serie de pasos antes de poder tener tu tienda online establecida.
En este artículo te dejamos una serie de consejos para que puedas vender tus piezas digitales efectivamente.
Empieza con una tienda propia
Necesitarás tu propio sitio web y una tienda online para poder vender tu arte digital. Si bien es cierto que existen tiendas online donde podrías acceder para exhibir y vender tus piezas digitales, es mejor empezar con una tienda propia porque de esa manera tienes el control de cómo luce tu sitio y no tendrás que pagar comisión. Así que si tienes los recursos para crear una tienda propia deberías hacerlo.
Usa gráficos excelentes
En una tienda online, tus clientes se basan totalmente en las imágenes que ven. Asi que asegúrate de usar imágenes de buena calidad de tu arte digital, de modo que los visitantes puedan apreciarlas mejor.
Ten en cuenta el fondo, utiliza un color neutro para que el color no afecte la visualización de tus piezas digitales.
Personaliza tu sitio
Si vendes arte digital es probable que ya tengas un estilo definido. Plasma ese estilo propio en tu tienda online. Muchas plataformas de comercio electrónico te ofrecen plantillas para que puedas lanzar tu tienda sin demora. Algunas de estas plantillas son fácilmente modificables y se pueden variar su color y tipografía. Una plantilla es una buena opción si quieres lanzar tu sitio rápidamente.
Integra redes sociales
Coloca enlaces de Facebook , Twitter y Pinterest. De ese modo, puedes incrementar el reconocimiento de tu marca por parte de tus clientes. Además, los clientes tienden a confiar más en una marca que tiene presencia en redes sociales pues demuestra que está dispuesta a comunicarse con ellos.
Proceso de compra simple
Este punto es de suma importancia en toda tienda online. Así que asegúrate que la navegación es sencilla y tu catálogo está bien organizado mediante categorías de modo que pueden hallar lo que están buscando en cuestión de segundos.
El proceso de compra debe ser lo más sencillo posible, debe completarse en un par de pasos y es preferible si el usuario no debe crear una cuenta para poder comprar online.