Trabajar y hallar el éxito trabajando como diseñador web freelance es bastante gratificante, sin embargo, hay una serie de tareas que debes realizar, adicionales al diseño web. También, debes contar con una serie de habilidades para organizarte y comunicarte con el cliente, entre otras cosas.
Parte de trabajar como freelance significa también realizar presupuestos para tus clientes de acuerdo al proyecto que quieran desarrollar. En este documento no deben existir errores de ningún tipo, pues en base a ese presupuesto el cliente puede aceptar o no dejar su proyecto en tus manos. En este artículo te mencionamos los errores que debes evitar a toda costa al realizar un presupuesto de un proyecto de diseño web.
No entender la magnitud del proyecto
Ni dos proyectos ni dos clientes con los que trabajes son iguales. Si bien es cierto que un proyecto te puede servir como base para desarrollar otro e incluso hay ciertas partes del proceso que se mantienen iguales, el proyecto en sí es distinto. Entender el objetivo de cada proyecto te ayuda a planificar por adelantado cómo lograr esos objetivos.
Para poder entender mejor un proyecto podemos hacer uso del brief del proyecto. En este documento encontraremos información esencial para poder comprender el objetivo del proyecto. Ese objetivo puede ser equivalente a diversas horas de trabajo (todo depende del objetivo en sí) que, al mismo tiempo, serán esenciales para poder calcular el presupuesto del proyecto. Por esta razón, debes ser cuidadoso y tomar el tiempo necesario para entender adecuadamente los objetivos del proyecto.
No calcular adecuadamente el número de horas necesarias para finalizar el proyecto
Ser freelance es cambiar tus horas de trabajo por dinero. A diario sólo cuentas con un número limitado de horas, así que es necesario usar sabiamente tus horas y cobrar un precio adecuado por cada hora de trabajo. Para muchos freelance puede ser complicado ponerle precio a su trabajo pues hay muchos factores que deben tomarse en consideración.
Cuando establezcas cuántas horas necesitarás para finalizar un proyecto no te olvides de tomar en consideración el tiempo que pasas con cliente presentando tus bocetos y primero diseños, contestando correos electrónicos referentes y otras actividades que parecen no estar dentro del proceso creativo, pero todos ellos son actividades de gestión de cliente, esenciales en todo proyecto.
Es importante también tener en cuenta en realidad el número de horas que puedes trabajar diariamente. Es cierto que hay ciertos días que puedes sobrepasar el límite y trabajar horas extra, pero es probable que tu concentración y ánimos no sean los mismos. Es importante encontrar un equilibrio y balancear tu trabajo con tiempo para ti, en donde puedas relajarte y pasar tiempo con tu familia y amigos.
No tomar en cuenta la programación que requiere el proyecto web
Si sólo te especializas en diseño web y tienes una idea básica sobre desarrollo web, es necesario que tomes como parte del presupuesto el contrato a algún desarrollador para que se encargue de la parte de programación del proyecto web. Sin embargo, tal vez esta opción no sea tan atractiva para ti pues has decidido ser freelance y básicamente, en este punto, dependes de un desarrollador. Puede ser todo un reto coordinar con el desarrollador y luego con tu cliente, sin mencionar que tienes una fecha límite.
La otra opción es usar una plataforma para generar código validado por la W3. Una de las plataformas más populares ara este propósito es Webydo. Es bastante poderosa, te permite diseñar a gusto y es sencilla de usar para cualquier diseñador. Además, incluye características de última generación como parallax scrolling, diseño adaptativo, entre otras.
No incluir el número de revisiones
Crear un sitio web con el cual el cliente este satisfecho es una de las metas de un diseñador web. Usualmente esto se da tras muchas reuniones con el cliente y muchas revisiones de diseño. En base a los comentarios de cliente podemos realizar modificaciones y crear un sitio web con el cual el cliente esté satisfecho.
Es imposible determina cuántas revisiones necesitará un proyecto, pero es necesario establecer un número de revisiones por cada proyecto. De manera usual, 3 revisiones, cada una en fases centrales del proyecto, deberían ser suficientes. La respuesta de cliente en base a las revisiones debería ser lo más completa posible e incluir todos los cambios que deben realizarse.
En caso un proyecto necesite más revisiones de las que habías planificado, deberás conversar con tu cliente para añadir al pago final el tiempo adicional que invertirás al realizar estos cambios, es decir, el tiempo adicional por revisión.
No informar sobre los costos adicionales
El presupuesto es un tema delicado y por ello debe ser tratado con honestidad. Debes incluir cualquier costo adicional e informar de ello al cliente. Estos costos adicionales pueden ser desde temas de compra de plataformas especializadas, compra de tipografías o fotografías, etc. Habla este tema con tu cliente y asegúrate que comprenda sobre los costos adicionales del proyecto.
No establecer un pago inicial
Organizar tu proyecto y dividirlo en fases es parte importante del proceso de diseño, pues te permite establecer objetivos y un tiempo límite para lograrlos. De esta manera, es sencillo mantenerse al día en el proyecto y evitar trabajar fuera de tu horario de trabajo para poder finalizar el proyecto.
Pero dividir el proyecto en fases no sólo te permite establecer objetivos y organizarte, sino que también te ayuda a establecer las fechas de pago según la fase del proyecto en el que te encuentres. Muchos diseñadores se simplifican la vida y deciden establecer un pago inicial, antes de iniciar el proyecto, que representa un porcentaje del pago total, pero también podrías dividir los pagos en tres fechas o más, dependiendo de la dificultad del proyecto.
No firmar un contrato
Ya que eres un profesional y le vas a ofrecer tus servicios al cliente, en base ciertas expectativas y requerimientos específicos de un proyecto, es obvio que debe haber un contrato de por medio, en donde se indique las fechas límites y el monto que debe pagar el cliente por el trabajo, así como las fechas y el porcentaje para los adelantos, así como incluir el número de revisiones y el pago por cada revisión adicional.
Ya que es probable que no cuentes con conocimiento de temas legales, es mejor contratar a un abogado para que elabore el contrato, de esa manera te evitas problemas y malentendidos más adelante.