Actualmente los móviles ya no cumplen un solo propósito y es por ello que el diseño de interfaces móviles ha cobrado gran importancia. Existen un gran variedad de aplicaciones móviles que tienen diversos propósitos, desde realizar apuntes y guardar páginas que nos parezcan interesantes hasta aplicaciones que contabilizan las millas que corremos y monitorizan nuestro ritmo cardíaco. Desde ayudarnos a organizarnos con nuestras tareas diarias hasta servirnos de entretenimiento en esos momentos en los que estás esperando a que venga el autobús.
Sin duda alguna, aprender a crear aplicaciones móviles puede llegar a ser rentable si lo incluyes en tu curriculum e incluso si llegas a crear tu propia aplicación. Por supuesto, se necesita una estrategia de marketing para poder llegar a ser grande en el mercado de aplicaciones móviles, pero ese es otro tema aparte.
En este artículo nos enfocamos en la interfaz de usuario de las aplicaciones móviles. El objetivo primario es que la experiencia de usuario sea óptima y por ello te damos algunos consejos que te conviene tener en cuenta.
Deshazte de las características innecesarias
El principal punto a tener en cuenta en los dispositivos móviles es el tamaño de la pantalla, mucho menor que el de los ordenadores. ¿Cómo es posible incluir todas las características que deseas? Si existe una versión web de dicha aplicación para ordenadores, entonces es aún más probable que los usuarios realicen comparaciones entre ambas y esperen una experiencia similar en la aplicación móvil. Para cualquier diseñador y desarrollador, esta es una situación problemática.
La solución es evaluar que elementos pueden ser eliminados del diseño para que la interfaz no se vea desordenada. Recuerda que colocar demasiados elementos dificulta la correcta lectura de la composición, sin mencionar que puede hacer bastante complicada y frustrante la navegación. Y definitivamente no quieres que tu usuario esté frustrado.
Así que opta por una interfaz ordenada, limpia y simple, minimalista incluso si así lo deseas. Deshacerte de los elementos que no aportan en tu diseño, te ayudará a mejorar la experiencia de usuario.
Elige los colores adecuados
El color, tema relevante en todo diseño. Los colores no sólo ayudarán a definir más claramente la “atmósfera” de tu aplicación. Por supuesto, la tipografía y el estilo que elijas también contribuyen a crear un entorno. Todos estos elementos tienen un gran poder comunicativo para los usuarios y definitivamente podrían ayudar a potenciar el mensaje o establecer a quién va dirigida la aplicación.
Los colores, particularmente, son una herramienta poderosa pues pueden transmitir sensaciones y emociones. Aunque los sentimientos asociados a los colores varían grandemente según el país o región, es bastante útil conocer sobre la Psicología del Color puede ayudarte a realizar decisiones de color mucho más acertadas para el fondos y los iconos en tu aplicación.
Mantén una sola línea gráfica
Elegir colores, tipografía, el estilos de los iconos y los botones es un proceso que debes realizar con mucha paciencia. Todos estos elementos deben estar alineados bajo un mismo estilo. Así que antes de decidir el aspecto de cada elemento por separado, sería mucho más efectivo si estableces el estilo de diseño que quieres emplear. Este estilo también va asociado al público para quién estás diseñando, es decir, los usuarios de tu aplicación. De esta manera, te aseguras que todos los elementos tengan relación el uno con el otro. Después de todo, el diseño de una interfaz se considera también una composición donde es importante que cada elemento forme parte de un conjunto. Es decir, que se vean en concordancia.
Crear una interfaz con una línea gráfica definida no sólo hará que la aplicación luzca profesional, sino que evitará confusiones por parte del usuario. Si bien la interactividad es importante en la experiencia de usuario, el diseño también lo es y tu usuario preferirá una interfaz sencilla, donde reconozca qué elementos pertenecen a un solo grupo y con cuáles de ellos se puede interactuar.
Mantente al tanto de las tendencias
Las tendencias de diseño actuales tienen una razón de ser. Cada una de ellas sirve para un propósito específico y es útil en ciertas situaciones. Conocer sobre las tendencias en el diseño de aplicaciones móviles te ayudará a crear una interfaz con la cual los usuarios se familiaricen de manera inmediata. Es decir, el proceso de aprendizaje puede ser más rápido al tomar en cuenta ciertas tendencias de diseño y patrones de interacción establecidos.
Estudia las principales tendencias, analiza el diseño de interfaces de aplicaciones populares, así como su interactividad. Hacer este análisis te ayudará a descubrir ciertos patrones de interacción genéricos con los que los usuarios ya están familiarizados y definitivamente les alegrará ver esos patrones implementados en tu aplicación. El objetivo es hacer que el usuario aprenda a usar tu aplicación en el menor tiempo posible y para ello hay que recurrir a ciertas reglas ya establecidas.
Asimismo, analizar las tendencias de diseño te ayudará a descubrir su correcto uso y podrás tener una gran variedad de recursos que puedes tener en cuenta al momento de diseñar tu aplicación. Tal vez alguna tendencia en particular sea ideal para tu interfaz.
Haz uso de las características únicas de los dispositivos móviles
Hay diversas razones por las cuales muchos usuarios prefieren navegar en dispositivos móviles: son más pequeños y prácticos, puedes llevarlos a donde quieras y seguir navegando en internet mediante una red WiFi o mediante una red de datos contratada por tu proveedor de servicios telefónicos. Y por supuesto, el grado de interactividad. Es decir, controlarlo todo con la punta de tus dedos. Es una sensación totalmente distinta y en la actualidad los dispositivos móviles ofrecen características bastante avanzadas que te permiten disfrutar al máximo el tiempo que pasas navegando en internet.
Utiliza estas características especiales de los dispositivos móviles para poder añadir mayor interactividad a tu aplicación. Hay diversos gestos táctiles de los que puedes hacer uso para activar ciertas utilidades de tu aplicación. Solamente asegúrate de ofrecer al usuario un pequeño tutorial o una breve sección de consejos para poder sacar provecho de tu aplicación.
Recuerda que el proceso de inicio de sesión debe ser sencillo
En la actualidad, gran parte de los usuarios prefiere acceder a aplicaciones mediante sus cuentas de Facebook o Twitter. Esto hace que sea mucho más sencillo manejar diversas aplicaciones en dispositivos móviles. Es importante ofrecer esta opción a tus usuarios, aunque también debes recordar que probablemente existe un pequeño grupo que preferirá acceder mediante su cuenta de correo electrónico. No olvides también tenerlos en cuenta.
Los formularios de inicio de sesión deben ser sencillos. Mientras menos campos para rellenar posean, más probable es que tu audiencia se decida a inscribirse y convertirse en usuario. Así que, al momento de pensar en tus formularios de inicio de sesión y de inscripción, coloca sólo los campos que sean realmente necesarios. Analiza por qué necesitas cierto tipo de información del usuario y si ésta es realmente relevante. Revisa varias veces los datos que decidas solicitar a tus usuarios y considera si hay alguna forma de hacer el proceso de inicio de sesión mucho más sencillo.
La fase de prototipos y pruebas es esencial
Para poder desarrollar una aplicación móvil hay un proceso bastante establecido. Primero se analiza el pedido del cliente, se hacen todas las preguntas necesarias y mediante esa información se comienzan a hacer los primeros bocetos en papel. Usualmente los primeros bocetos no serán los finales y se deberán hacer varios ajustes antes de tener el boceto final aprobado. Todas estas fases son esenciales, desde entender qué es lo que desea el cliente, generar las ideas iniciales hasta llegar a la “idea ganadora”.
Luego sigue la fase de prototipado, a la cual se le debe prestar igual atención que las primeras etapas. Un prototipo que tenga características interactivas puede ser de mucha ayuda si es que estás realizando la aplicación para un cliente pues le ayuda a visualizar cómo funcionará la aplicación final.
Y por supuesto, la etapa de pruebas donde se debe comprobar cada función de la aplicación y verificar que funcione correctamente. Es mejor que tu equipo de desarrollo y tú encuentren estos errores antes de que el usuario lo haga. Así que no temas ser bastante minucioso en esta fase final del proceso de desarrollo.
En conclusión…
Diseñar una interfaz de usuario para una aplicación móvil puede ser todo un reto, principalmente porque cuentas con un espacio bastante limitado y más pequeño que el de los ordenadores. Sin embargo, si lo logras hacer de manera correcta, tu aplicación puede llegar a ser un éxito y sin duda alguna esta nueva habilidad resultará de utilidad en el futuro.