Trabajar en equipo no es sencillo. Hay muchos factores que influyen en el trabajo en equipo como el ego, las diferentes personalidades, creatividad, valores, etc. Sin embargo, por más que no te agrade alguien a veces no tienes otra opción más que trabajar en equipo con esa persona.
Para estos casos, te dejamos un par de consejos para que de hecho puedas trabajar en un ambiente pacífico y llegar a los objetivos que les han trazado.
Entender por qué no se llevan bien
A veces es difícil indicar la razón exacta por la cual no nos llevamos bien con alguien. Tal vez dijo algo que te afectó, tal vez te parece grosero, tal vez te parece que es descuidado con su trabajo. Sea la razón que sea debes descubrirla y seguir adelante.
Al final, no importa qué es lo que no te agrada de alguien, porque esa persona no van a cambiar para ajustarse a tus gustos. No puedes cambiar ni el comportamiento ni la personalidad de alguien. Sin embargo, si logras descifrar por qué no te agrada alguien, puedes manejar tus sentimientos hacia esa persona. Esto te ayudará no sólo a entenderte mejor a ti mismo, sino que podrás desarrollar una relación laboral saludable con tus compañeros de trabajo o equipo.
Trabajar en equipo para llegar a la meta
Para poder superar esos sentimientos negativos que sientes hacia algún compañero, debes concentrarse en las cosas en común que ambos tienen: su trabajo. Si limitas tus interacciones solamente a asuntos relacionados al proyecto que tienen entre manos, podrás limitar y manejar esos sentimientos negativos.
Hallar valor en esa persona
El hecho de que ambos estén contratados en la misma empresa significa que tanto tu jefe como tus otros compañeros de trabajo alrededor valoran a esa persona. Intenta ver qué es lo positivo que tus compañeros hallan en esa persona.
Una vez que hayas podido darle otro enfoque a esos sentimientos negativos, tendrás una nueva perspectiva de esa persona y podrás darle el crédito y el respeto que esa persona se merece.
Céntrate en el trabajo
Cuando trabajas en una oficina te encuentras a todo tipo de personas, con algunos congeniarás, con otras no. Pero de algún modo tendrás que interactuar con todas ellas. Puede que sus personalidades y valores sean distintos, pero no es razón suficiente para dejar de realizar un buen trabajo.
Si te dedicas a tu trabajo y te esfuerzas por alcanzar siempre los objetivos que se te trazan, verás que es más sencillo aprender a lidiar con las personas. Sólo concéntrate en que quieres hacerlo bien y que, si los han juntado como equipo, debe ser por alguna razón.
